China ha dado un paso significativo en su estrategia energética al aprobar cinco nuevos proyectos nucleares con una inversión total de más de US$28 mil millones. Esta iniciativa, que se ha detallado en el South China Morning Post, incluye la construcción de 11 nuevos reactores en las provincias costeras de Shandong, Zhejiang, Jiangsu, Guangdong y en la región autónoma de Guangxi Zhuang. Esta expansión marca el mayor crecimiento en el sector nuclear en China desde 2019, consolidando su posición como una de las principales potencias en energía limpia y renovable a nivel global.
La decisión de China refleja un compromiso continuo con la energía nuclear, que el país ha estado intensificando en los últimos años. En la primera mitad de este año, China incrementó su inversión en energía nuclear en un 13.5% en comparación con el año anterior. Actualmente, China opera 55 plantas nucleares y está construyendo 36 unidades adicionales, posicionándose como líder mundial en proyectos nucleares en desarrollo.
Objetivos climáticos de China
Este impulso nuclear se alinea con los objetivos climáticos de China, que buscan alcanzar el pico de emisiones de CO2 antes de 2030 y lograr la neutralidad de carbono para 2060. La energía nuclear, que contribuye con aproximadamente el 5% del suministro eléctrico del país, ha permitido a China evitar la quema de más de 123.3 millones de toneladas de carbón en 2023. Este avance en la transición energética es crucial para reducir la dependencia de fuentes de energía fósiles y mitigar el impacto ambiental.
China también sigue apostando por otras fuentes de energía, incluyendo el petróleo, dada su vasta riqueza en recursos naturales. Sin embargo, la expansión nuclear refleja un esfuerzo estratégico para diversificar su mix energético y reducir las emisiones de gases de efecto invernadero.
La estrategia de China de diversificar su matriz energética y aumentar la participación de fuentes no fósiles al 25% para 2030 es parte de su visión para transformar su perfil energético y contribuir a la lucha global contra el cambio climático. Esta expansión nuclear no solo marca un avance importante en la política energética de China, sino que también proporciona una imagen contrastante del país, que busca equilibrar su papel como uno de los mayores emisores de carbono con su compromiso hacia un futuro más ecológico.
La aprobación de estos cinco nuevos proyectos nucleares subraya el compromiso de China con la energía limpia y su ambición de liderar en la transición energética global. Con una significativa inversión en el sector nuclear, China está sentando las bases para un futuro energético más sostenible y menos dependiente de combustibles fósiles.
