La comodidad de la carga inalámbrica, que ha transformado el uso de los teléfonos móviles, está a punto de llegar al mundo automotriz de la mano de Porsche. La compañía alemana ha anunciado que será el primer fabricante de automóviles en comercializar un sistema de carga de 11 kW con una placa base de una sola pieza, una tecnología que promete hacer la carga de vehículos eléctricos tan simple como estacionar.
Esta innovación se estrenará con la nueva generación del Porsche Cayenne totalmente eléctrico, que se podrá encargar con este dispositivo. La comercialización de la placa de carga, bautizada como Porsche Wireless Charge, comenzará en 2026, y estará disponible tanto en los centros de la marca como en su tienda online.
Un sistema diseñado para la comodidad diaria
“La facilidad de uso y la infraestructura de carga siguen siendo factores decisivos para la aceptación de la movilidad eléctrica”, afirmó Michael Steiner, miembro del Consejo de Dirección de Porsche AG. “Estamos orgullosos de que la carga inductiva pronto esté disponible en la producción en serie de Porsche. Cargar un coche eléctrico en casa nunca habrá sido tan fácil y cómodo”.
El sistema de Porsche utiliza una placa de suelo One-Box que elimina la necesidad de una caja de pared o una unidad de control externa. Con una potencia máxima de 11 kW, iguala el rendimiento de una conexión por cable convencional y alcanza una impresionante eficiencia de transferencia de energía del 90%.
Dado que un análisis de la marca muestra que alrededor del 75% de los procesos de carga de sus vehículos eléctricos ocurren en el domicilio, el potencial de este sistema es enorme. La placa, de unos 50 kilogramos, es resistente a la intemperie y está diseñada para instalarse fácilmente en cualquier garaje o plaza de aparcamiento.
Tecnología inteligente y segura
Para iniciar la carga, el conductor solo necesita estacionar el vehículo sobre la placa de suelo. La función Surround View en la aplicación My Porsche facilita la maniobra para alinear perfectamente el vehículo. Una vez en posición, el Cayenne baja automáticamente para reducir la distancia entre la unidad receptora en sus bajos y la bobina de la placa, y la carga comienza sin necesidad de cables ni conexiones.
La seguridad es una prioridad: la placa cuenta con un detector de movimiento y objetos extraños que interrumpe automáticamente el proceso de carga si algo se interpone entre el vehículo y la bobina. Además, el sistema ha sido sometido a exhaustivas pruebas por entidades independientes como TÜV Süd y cuenta con las certificaciones CE y UL.
Porsche Wireless Charge será lanzado inicialmente en Europa en 2026, con otros mercados como México y Puerto Rico siguiendo el despliegue. Esta nueva tecnología se complementa con la ya impresionante capacidad de carga rápida del nuevo Cayenne, que con corriente continua (CC) alcanza hasta 400 kW, estableciendo un nuevo estándar en el mercado.
Un prototipo que brilla con luz propia
El lanzamiento de este sistema se realizó en el IAA Mobility de Múnich, donde Porsche presentó un prototipo del nuevo Cayenne con una pintura fluorescente. Este acabado innovador, compuesto por más de 25 capas ultra finas, se ilumina al pasar la electricidad, creando un patrón de camuflaje de colores vivos que resalta la conexión entre la tecnología y el diseño. Este impresionante detalle visual sirvió como la perfecta metáfora de una marca que sigue liderando la innovación y el futuro de la movilidad eléctrica.
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