Andrés Astacio es un profesional del Derecho, con experiencia en la asesoría de empresas, gestión de conflictos cotidianos y de alto impacto, así como en la gestión de las relaciones interinstitucionales y la estructuración de estrategias tendentes a la solución de los problemas que puedan afectar el desarrollo de las mismas y es el actual vicepresidente ejecutivo de las Empresas Distribuidoras de Electricidad y secretario del Consejo Unificado de las Empresas Distribuidoras de Electricidad. Gentilmente nos ofreció esta entrevista exclusiva para Ehplus.
- ¿En qué sentido impacta al sistema energético la regulación de la movilidad eléctrica en el país?
La transición energética a la que nuestra sociedad está avocada impactará todos los ámbitos de nuestra vida cotidiana. En el sector eléctrico, este impacto vendrá tanto por el lado de la oferta de electricidad como por la demanda. En la oferta tendremos una mayor integración de fuentes de generación sobre la base de recursos renovables y, previsiblemente, una mayor eficiencia en los sistemas de almacenamiento.
Por el lado de la demanda, tendremos un mayor uso de la electricidad para fines que, tradicionalmente, se utilizaban otros tipos de energía, siendo probablemente el de mayor trascendencia la electromovilidad, en la que se prevé una sustitución de una parte importante del parque vehicular de los combustibles fósiles tradicionales a este tipo de vehículos.
Es en este contexto, se hace necesario la regulación temprana de esta nueva modalidad de uso de la electricidad, a los fines de poder generar los incentivos necesarios para su desarrollo, dado los beneficios que genera y, a la vez, evitando que una disrupción súbita ponga en riesgo la estabilidad del sistema. Para esto, es necesario generar los incentivos para que las empresas involucradas puedan realizar de manera oportuna las inversiones necesarias y, a su vez, concientizar al usuario final en las bondades y responsabilidades que este nuevo modelo implica.
- A cuántas empresas del país va a beneficiar este reglamento (pregunta se refiere a empresas de estaciones de recarga).
En este momento es imposible preestablecer el número de empresas que se acogerán a la normativa. Es un caso extraño en el cual el regulador puede establecer normas en los momentos iniciales de la industria.
La reglamentación lo que busca es, por un lado, generar un modelo de competencia en la instalación de las estaciones de recarga rápida, armonizando con los derechos adquiridos de los concesionarios de distribución los cuales, de acuerdo con la normativa, son distribuidores exclusivos de la electricidad en sus zonas de concesión.
- ¿Cuál va a ser el carácter de máximo de las tarifas?, ¿va a existir una indexación de las mismas?
Las tarifas establecidas por la Superintendencia de Electricidad, en este caso, tendrán carácter de máximos precios posibles de venta por parte de las distribuidoras, en las que se tratará de incentivar, y modelar, que las recargas se realicen en las horas de bajo consumo del sistema eléctrico nacional, a fin de poder minimizar el impacto en la red eléctrica y el parque de generación. Adicionalmente, poder establecer precios competitivos para los usuarios finales.
Con relación a la indexación, debemos tener en cuenta que el precio final de la electricidad está basado en una serie de componentes variables que influyen en su determinación. Esto debido a que la energía, en gran medida, se genera sobre la base de combustibles fósiles importados en los que la República Dominicana es un tomador de precios, siendo este un hecho que necesariamente debe de tomarse en cuenta para garantizar la sostenibilidad financiera del sistema.
- ¿Qué normas técnicas deberán cumplir las obras e instalaciones de movilidad eléctrica?, ¿qué penalidad existiría en caso de no debido cumplimiento?
En la Superintendencia de Electricidad estamos trabajando una actualización de las normas constructivas, que serán necesarias para poder dar respuesta a los requerimientos de esta nueva tecnología, tanto en las estaciones de carga como en las viviendas, de forma tal que se pueda diferenciar el consumo doméstico del consumo de movilidad y con ello no impactar al cliente final.
De igual manera, estamos trabajando en la planificación de las obras de red necesarias para satisfacer esta demanda creciente.
- ¿Qué empresa dará la certificación de calidad?, ¿cómo será el proceso?
La Superintendencia de Electricidad como ente regulador del sistema, fiscalizará la ejecución de las previsiones de la normativa y por ende certificar su cumplimiento.
- ¿El camino recorrido hasta llegar a lograr esto ha sido bien consensuado por los sectores?
Estamos en proceso constante de consulta con los distintos agentes y personas interesadas, habiendo compartido en más de una ocasión los distintos borradores que se han ido generado para su enriquecimiento.
Convocaremos a audiencias públicas con los actores y empresas del sector, a fin de que éstos puedan dar sus observaciones y apreciaciones al Reglamento.
- ¿Queda algún vacío legal que aún no se haya podido tomar en cuenta en la creación de este reglamento?
Estamos en una fase inicial de la transición hacia la electromovilidad. Esta reglamentación es, de cierta forma, la base regulatoria que necesariamente tendrá que adaptarse a las realidades que nos presente el desarrollo de la industria.
- ¿Qué más haría falta tomar en cuenta sobre la ME para sentir que esta todo contemplado e incluido?
Como mencioné anteriormente, aún estamos en una fase muy primaria, por lo que resulta imposible saber que es todo lo que se requiere, desde el punto de vista normativo. Hay que ver cuál será el patrón de carga de los usuarios y como la red va respondiendo a esta nueva demanda base.
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