EHPLUS, REDACCIÓN.-Chile se ha convertido en uno de los países de América Latina que ha liderado la penetración de energía renovable en su matriz de generación, al contar con la radiación solar más alta del mundo, fuertes vientos de norte a sur para desarrollar energía eólica, un gran potencial de energía marina, gran capacidad para desarrollar biogás y su recurso geotérmico.
De acuerdo con datos publicados por Coordinador Eléctrico Nacional, a febrero del 2024, el 41% de la energía generada en Chile provino de fuentes renovables no convencionales. Esto, al contar con una capacidad instalada de generación en base a energía eólica, la biomasa y la geotérmica, que supera los 15,000 MW.
Durante una entrevista exclusiva con EHPlus, el subsecretario de Energía de Chile, Luis Felipe Andrés Ramos Barrera, reveló que actualmente están trabajando en una iniciativa legislativa que busca suplir el 80% de la demanda de energía con renovables al 2030.
“Esta es una política que busca convertir la energía renovable en la principal fuente de generación. Aunque la energía renovable es variable, en determinadas horas del día, esta ha alcanzado niveles bastante altos, como el registrado en febrero, donde alcanzamos un 96% de generación en base a renovables”, explicó Ramos Barrera.
De acuerdo con el New Energy Finance Climascope elaborado por Bloomberg New Energy Finance y el Banco Interamericano de Desarrollo, Chile alcanzó el primer lugar en inversión de energías renovables y en la lucha contra el cambio climático de la región de América Latina y el Caribe.
Sim embargo, el subsecretario de Energía de Chile entiende que el país aún enfrenta desafíos importantes en materia de transición energética, dentro de los que cito la descarbonización de la matriz, una mayor incorporación de energía renovable y en el desarrollo de la industria del hidrógeno verde.
Para vencer estos retos, Ramos Barrera explicó que actualmente están trabajando en la implementación de un plan de acción que permita que, al 2030, Chile exporte de manera industrial el hidrógeno verde, el cual se perfila como el nuevo combustible.
Retos de la movilidad eléctrica en Chile
El fomento de la movilidad eléctrica es otra de las apuestas de Chile para reducir la huella de carbono y abordar los desafíos ambientales. Para esto, están llevado a cabo la “Estrategia Nacional de Electromovilidad en Chile”, la cual ha permitido la ampliación de la infraestructura de carga y un incremento de los incentivos para la compra de autos eléctricos.
De acuerdo con el subsecretario de Energía de Chile, aunque hoy día es competitivo utilizar vehículos eléctricos, el costo de adquisición aún sigue siendo un desafío para una mayor migración hacia la electromovilidad, por lo que espera que, en los próximos años, estos puedan ser más accesibles para los ciudadanos.
En ese sentido, la expansión de la infraestructura de carga también representa un desafío para que Chile pueda satisfacer la demanda de energía que requieran los 81 mil autos eléctricos que estima la compañía Enel que alcanzará el país en 2024.
“Uno de los grandes los desafíos en cuanto a la política de electromovilidad no es solo la introducción de vehículos eléctricos, sino el generar un ecosistema para que esta política pueda desarrollarse y, dentro de ese ecosistema, es fundamental una infraestructura de carga”, dijo.
En ese sentido, agregó que actualmente se encuentran trabajando para tener una infraestructura de carga que los usuarios de los vehículos eléctricos puedan recorrer el país entero.
El subsecretario de Energía de Chile afirmó que, como la electromovilidad se vuelve cada día más rentable y competitiva, el gobierno se está enfocando en promover sus políticas públicas que le permitan una mayor incorporación de la movilidad eléctrica en transporte público y en las empresas privadas.
Según datos del Ministerio de Transporte y Telecomunicaciones de Chile, en enero de 2024 la capital alcanzó la cifra de 2,000 buses eléctricos en el Sistema RED, representando el 31% de su escuadrilla total.
Recibe nuestras noticias por correo
