En un reciente encuentro con periodistas, Miguel Collado Di Franco, vicepresidente ejecutivo del Centro Regional de Estrategias Económicas Sostenibles (Crees), expresó la necesidad urgente de privatizar el sector eléctrico en la República Dominicana.
Según el economista, esta medida garantizará una mejora significativa en el servicio y en la administración del mismo, aliviando además la carga financiera sobre el Estado.
Collado Di Franco sugirió que la privatización debe empezar con las distribuidoras, con una licitación nacional e internacional que se hagan cargo de esa parte esencial que está afectando económicamente el país. «Es vital que en esta licitación participen empresas de reputación creíble, no aventureros que quieran venir a la República Dominicana solo para extraer rentas. Se debe poner en juego una garantía de inversión seria y comprometida», afirmó el economista.
La clave es atraer a empresas serias y comprometidas que estén dispuestas a invertir en la infraestructura y en la mejora del servicio.
El experto subrayó la importancia de seleccionar empresas dispuestas a sacrificar recursos para mejorar el servicio. «Privatizar no es solo transferir la gestión al sector privado, sino también asegurarse de que estas empresas están comprometidas a invertir y mejorar el servicio sin cargar al contribuyente con los costos de ineficiencias y subsidios», añadió.
Dentro de las una de las principales ventajas de la privatización mencionó la eliminación de los subsidios. «Actualmente, los contribuyentes están pagando por los subsidios al sector eléctrico. Este dinero es nuestro y debería ser utilizado de manera más eficiente», afirmó.
Un vistazo a las pérdidas
El Crees realizó un levantamiento de tres tipos de pérdidas que se generan en el sector a febrero de este 2024, señalando como el indicador de inestabilidad que refleja la administración y sus componentes estructurales:
- Pérdidas totales alcanzaron 38.8 %.
- Pérdidas de energía se ubicaron en 35.2 %.
- Energía no cobrada representó 3.6 %.
El esquema muestra que la única variable que ha mejorado significativamente es la cobranza del servicio, con un índice de más del 95 %.
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La privatización, según el economista, garantizaría que todos, desde pequeños hogares hasta grandes empresas, paguen por el servicio que reciben. «Es fundamental que se establezca un sistema donde el que no paga, pague, sea quien sea. La carga financiera debe ser justa y equitativa», enfatizó.
Collado Di Franco reconoció que el proceso de privatización no estará exento de desafíos, pero insistió en que los beneficios superarán las dificultades. «La clave es atraer a empresas serias y comprometidas que estén dispuestas a invertir en la infraestructura y en la mejora del servicio. Esto no solo mejorará la calidad del suministro eléctrico, sino que también liberará recursos públicos que pueden ser utilizados en otras áreas prioritarias para el desarrollo del país», concluyó.
El Gobierno estimó un gasto de RD$86,845 millones en transferencias al sector eléctrico, de acuerdo con el Presupuesto General del Estado del 2024.
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