La escasez de controladores de tráfico aéreo, provocada por el cierre del Gobierno federal de Estados Unidos, está generando retrasos significativos este martes en los aeropuertos internacionales de Nashville y O’Hare (Chicago), y se prevé el cierre temporal de algunas torres de control.
La Administración Federal de Aviación (FAA) informó que el aeropuerto de Nashville dependerá de los sistemas de radar de la torre por “falta de personal”, y que un centro remoto se encargará de dirigir las rutas durante la noche.
Además, la FAA explicó que, debido al incremento de controladores reportados enfermos en las últimas 48 horas, los vuelos en Chicago presentan más de 40 minutos de retraso.
El comunicado oficial concluye pidiendo “paciencia” a pilotos y pasajeros, advirtiendo que quienes viajen en las próximas horas enfrentarán demoras considerables.
En el Aeropuerto Intercontinental George Bush, de Houston, se espera que esta noche la FAA emita órdenes de suspensión de vuelos por tiempo indefinido después de las 7:00 p. m. hora local.
Estas interrupciones en el tráfico aéreo se deben a que muchos controladores han abandonado sus puestos debido a la falta de pago provocada por el cierre del Gobierno federal, que mantiene congelados los salarios de los empleados públicos.
La paralización del Gobierno ocurre en medio de una disputa política entre demócratas y republicanos sobre el programa Obamacare y el financiamiento del Seguro Social, lo que ha impedido aprobar un plan provisional para mantener en funcionamiento todas las agencias federales.
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