Las empresas en Colombia enfrentan un panorama cada vez más complejo, no solo por la reforma laboral en debate que podría incrementar hasta en un 20% los costos laborales, sino también por el creciente costo de los servicios públicos, particularmente el de la energía eléctrica. Un reciente estudio de la startup Energy Master revela que en el último año, las tarifas de energía para las empresas han aumentado hasta un 32%, con un incremento promedio del 20% en los principales departamentos del país.
Impacto en las empresas y regiones más afectadas
El estudio, que analizó más de 300,000 recibos de servicios públicos entre el 1 de junio de 2023 y el 30 de junio de 2024, destaca que sectores como el comercio, restaurantes, oficinas, tiendas de ropa y supermercados han visto un aumento significativo en sus costos operativos. Según los datos, el costo por kilovatio/hora (kWh) pasó de $771 a $922 en promedio.
Por regiones, los departamentos más afectados incluyen Bolívar con un aumento del 32%, seguido por Atlántico (26%), Eje Cafetero (20%), Santander (19%), Valle del Cauca (18%), Bogotá y Cundinamarca (ambos con 16%).
Operadores y factores detrás del alza
Entre los operadores que han registrado los mayores incrementos en las tarifas de energía, sobresalen Afinia, con un aumento del 47% en los departamentos de Bolívar, Córdoba, Sucre y Cesar; EPM con un 37% en Antioquía, Santander, Norte de Santander, Caldas, Risaralda y Quindío; Air-e con un 19% en Atlántico, Magdalena y La Guajira; y Enel con un 3% en Bogotá y Cundinamarca.
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Las razones detrás de estos aumentos son diversas y complejas. Uno de los principales factores es la dependencia de las hidroeléctricas para la generación de energía en el país. La sequía provocada por el fenómeno de El Niño impactó fuertemente las finanzas, obligando a recurrir a generadoras térmicas con costos más altos. A esto se suma la especulación en los precios de bolsa y los cobros retroactivos por la opción de tarifa, que han terminado siendo una carga significativa para las empresas.
Consecuencias para el sector productivo
El costo elevado de la energía ha generado una factura total de $485,728 millones para las empresas, según indicó Alejandro Ramírez, CBO y cofundador de Energy Master. Este sobrecosto pone en jaque las finanzas de muchas compañías, generando incertidumbre sobre la capacidad de crear nuevos empleos y realizar inversiones en el futuro cercano. Además, la factura de energía representa el 95% del total de los servicios públicos pagados por las empresas analizadas, seguida por el agua (3%) y el gas natural (2%).
Proyecciones y preocupaciones a futuro
Las proyecciones no son alentadoras. Ramírez advierte que no se vislumbra una solución cercana para reducir las tarifas de energía. Aunque se esperaba que en 2023 el país alcanzara un 15% de generación con fuentes de energía no convencionales (Fncer), como la solar y eólica, la realidad es que apenas se ha logrado un 2%, evidenciando un escaso avance durante el actual gobierno. Esto pone en peligro la seguridad energética de Colombia en los próximos años.
El sector productivo colombiano enfrenta una tormenta perfecta de desafíos: la reforma laboral, la incertidumbre económica y fiscal bajo el gobierno de Gustavo Petro, y ahora, los crecientes costos de energía. Con aumentos de hasta 32% en las tarifas de electricidad, las empresas deben replantear sus estrategias para poder sobrevivir y prosperar en un entorno cada vez más adverso.
