Celso Marranzini, presidente del Consejo Unificado de las Empresas Distribuidoras de Electricidad (CUED), advirtió que las pérdidas técnicas y comerciales en el sector eléctrico han alcanzado niveles críticos, impulsadas principalmente por el fraude y la ineficiencia.
Durante su intervención, Marranzini señaló que estas pérdidas no solo generan un impacto económico significativo, sino que también deterioran la calidad del servicio, provocando apagones y fluctuaciones que afectan la vida diaria de millones de dominicanos.
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Marranzini subrayó que el fraude eléctrico no es solo un acto ilícito, sino una muestra de deslealtad hacia los ciudadanos que pagan por el servicio.
Estas prácticas ilegales han creado un círculo vicioso que perpetúa las deficiencias del sistema, generando una «sangría económica» que impide mejorar la infraestructura y ofrecer un servicio estable.
El funcionario destacó que la lucha contra estas pérdidas es uno de los desafíos más urgentes para lograr una transformación real en el sector eléctrico, y advirtió que no se puede seguir ignorando la gravedad del problema.
Según Marranzini, abordar esta situación requerirá un esfuerzo conjunto que incluya tanto la modernización de las redes como un combate efectivo al fraude.
El llamado de Marranzini resalta la necesidad de enfrentar de manera decisiva el impacto de estas pérdidas, que continúan obstaculizando el progreso hacia un sistema eléctrico eficiente y sostenible.
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